TONALTEPETL

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Por: Gustavo López Solórzano

La riqueza de nuestras tradiciones, es sin duda una rama de nuestras raíces que forma parte del legado que nuestros ancestros nos heredaron. La riqueza cultural de nuestro país va desde las más actividades más sencillas, como la de “Padrino mis Empanadas” hasta las que requieren preparación, coordinación y esfuerzo con mucha anticipación, como las danzas representativas de cada estado, por ejemplo. Por otra parte, existen expresiones culturales que sin ser parte de la tradición, si van adheridas a la misma de forma tal, que algunas personas no pueden concebirlas sin ellas. Con absoluto respeto a los gustos y aficiones de cada persona. En este caso, sin duda uno de los integrantes más graves lo representa el alcohol, que genera un sinnúmero de reacciones desfavorables para quien lo consume y en consecuencia suele afectar a terceros, que son quienes menos responsabilidad tienen.

En el cerebro, el alcohol en exceso inhibe las funciones de la región frontal, por lo que disminuye la memoria, la capacidad de concentración y el autocontrol. En el hígado, los efectos de esta metabolización son náuseas, vómitos y dolor de cabeza. En el riñón, elimina más agua de la que ingiere y provoca que el organismo la busque en otros órganos. Esto provoca que las meninges (membranas que cubren el cerebro) pierdan líquido lo que genera el dolor de cabeza. En el estómago, el alcohol aumenta las secreciones ricas en ácidos y mejora la digestión, pero cuando se bebe en exceso causa erosiones en la mucosa del estómago producidas por el etanol, principal componente del alcohol, con las consecuencias conocidas. El ardor estomacal será mayor si se mezclan diferentes bebidas, ya que la irritación gástrica se debe a todos los componentes bebidos. En la piel, el alcohol aumenta el flujo de sangre, por lo que presenta más sudoración. En los pulmones, el alcohol acelera la respiración, si el alcohol circulante es demasiado detendrá la respiración. En el corazón, los efectos del alcohol provocan un aumento en la actividad cardiaca y aceleración del pulso. Cuando el alcohol llega a la sangre, se produce una disminución de los azúcares presentes en la circulación, lo que provoca una sensación de debilidad y agotamiento físico.

Por si todo lo anterior fuera poco, la capacidad de concentración y atención disminuyen y con ello los reflejos fallan. Derivado del abuso en el uso del alcohol, México ocupa el séptimo lugar a nivel mundial en muertes por accidentes de tránsito. “jueves, viernes y sábado por la noche, se movilizan alrededor de 200 mil conductores bajo influencia del alcohol y por este motivo mueren al año aproximadamente 24 mil personas”, afirma Roy Rojas, asesor de la Organización Panamericana de la Salud. Lo que anteriormente era de hombres, hoy con la equidad de género las mujeres han querido igualar al hombre en este y otros aspectos, de tal forma que se ha incrementado en más del 50% la presencia de trastornos asociados a la ingesta de alcohol en el mal llamado sexo débil, la pregunta es, ¿Qué estamos haciendo como sociedad?

ABUELITAS:

La importancia de cumplir los compromisos y dentro de ello, reconocer que el trabajo en beneficio de la sociedad no lo hace una sola persona, sino que representa el esfuerzo conjunto de todo un equipo de colaboradores con buena voluntad, ha sido parte de la manera de actuar de la Profa. Leticia Contreras de Rangel, al frente del DIF municipal Colima. Quien de manera coordinada con las diferentes instituciones de nuestro estado y municipio, ha mantenido su compromiso de servir y hacerlo “con calidad y calidez a mujeres, adultos mayores, a los niños y niñas, a los jóvenes, a las personas con capacidades distintas, a los padres de familia, a todos”. Felicidades al equipo DIF municipal que sigue cumpliendo a los colimenses. Es cuánto.