Por: Gustavo López Solórzano
Las grandes oportunidades para ayudar a los demás rara vez vienen, pero las pequeñas os rodean todos los días. Sally Koch.
Mientras se agota el tiempo para encontrar supervivientes entre los escombros; en otros lugares muchas personas se enredan con la muerte. En Nepal, son miles los que se aferran a la vida, pues un terremoto de 7,8 grados en la escala de Richter azotó gran parte del valle central de Nepal dejando viviendas destruidas, carreteras destrozadas y las telecomunicaciones y conexiones eléctricas muy dañadas en esa zona, donde se encuentra Katmandú. Lo más triste, más de 5000 personas fallecidas y 11000 heridos más de 4000 personas desplazadas por la tragedia.
Los equipos de rescate y personas voluntarias luchan, pelean contra el tiempo buscando afanosamente entre los escombros, la vida se abre camino y los milagros se suceden generando nuevas expectativas, renovando el ánimo que por momentos parece perderse en la desolación. India y China se han visto afectados aunque en menor grado, las carencias que tiene Nepal restan capacidad de respuesta y el tiempo no se detiene. Las condiciones climáticas parecen agravar la situación pues impiden la llegada de la ayuda y en consecuencia se temen peores momentos; los servicios de comunicación, por ejemplo, se ha visto severamente dañados casi en su totalidad. La ayuda internacional ha sido solicitada con el fin de dar respuesta a las necesidades más elementales de la población.
El panorama es muy triste, la madre tierra sorprendió al mundo y de manera directa a los afectados por el terremoto. Desde 1934 no se sentía un sismo de esa magnitud y la gente pronto olvidamos que la naturaleza está viva, ya en otra ocasión fueron 17000 las personas fallecidas por un sismo que arrasó prácticamente con el lugar. Tristemente hoy se menciona que un equipo de investigadores bajo la responsabilidad de Laurent Bollinger, de la Comisión de Energías Alternativas y Energía Atómica de Francia, habrían anticipado la manifestación de la tierra con cierta precisión apenas dos semanas antes. “Los primeros cálculos sugieren que el terremoto de magnitud 7,8 del sábado probablemente no fue lo suficientemente grande como para quebrar la tierra hasta la superficie. Así que es probable que se esté acumulando más tensión y veamos más temblores de este tipo al oeste y el sur de esta falla en las próximas décadas”, dice Bollinger.
Hoy como nunca para los nepalíes la palabra solidaridad necesita transformarse en ayuda inmediata, el mejor hospital no da abasto a la demanda de atención que tiene, niños, adultos y personas de edad avanzada, sin duda esperan que el milagro de la vida se repita, sobrevivieron el terremoto, esperan hacer lo mismo recibiendo atención médica y alimentos. La sociedad internacional tiene la palabra.
ABUELITAS:
El calor sigue en Colima e incluso algunas lluvias leves se han dejado sentir por algunos rumbos, importante atender las sugerencias que nos hace la Secretaría de Salud Estatal para evitar enfermedades gastrointestinales, deshidratación, insolación o incluso quemaduras solares. cuatro son las medidas básicas para la prevención de diarreas: lavarse las manos antes de comer y después de ir al baño, consumir pescados y mariscos bien cocidos o fritos, lavar con agua y jabón frutas y verduras que se consuman crudas, y consumir agua clorada, hervida o desinfectada. Cuidar la salud es responsabilidad de todos.
ERUPCIÓN:
Felicidades a las niñas y niños que habitan en nuestro interior, a los pequeños de la casa y a todos los niños y niñas del mundo. Es cuánto.