*Exigen expulsar a activistas de Bios Iguana, los culpan de la violencia suscitada
Juan Carlos Flores|COLIMANOTICIAS
Colima, Col.- Un grupo de pobladores de Zacualpan, simpatizantes del destituido presidente de Bienes Comunales Carlos Guzmán Teodoro, se manifestaron en el Congreso para mostrar su rechazo al cambio de autoridades.
Vicente Evangelista Teodoro, comunero de Zacualpan, denunció que el Tribunal Agrario ha cometido una injusticia al destituir a Guzmán Teodoro “El problema es muy grave, hay anomalías que está validando el tribunal, no se ha llevado todo conforme a la ley, hay anomalías en la convocatoria y todo se dio para adelante, hay personas en la misma hoja de la acta están firmando en dos ocasiones”, dijo.
María de los Ángeles Cárdenas, habitante de Zacualpan, sostuvo que no permitirán tampoco el cambio de Enrique Carpio como comisario y exigió la salida de Gabriel Martínez y Esperanza Salazar, integrantes de la organización ecologista Bios Iguana, porque han dividido a la población.
Alegó que se dicen ser ecologistas y han permitido la tala de árboles “A raíz que entró este grupo se suscitaron problemas, muchas confusiones, ellos manejan información falsa, porque el presidente de la República pidió el cambio de las tierras para recibir un apoyo a Cerro Grande, pero estas personas manejaron la información, ellos dijeron que Carlos Guzmán pretendía cambiar a tierras ejidales para instalar la mina”.
Sostuvo que no pertenecen a ningún partido y rechazó que estén manipulados por el PRI “Son los Bios Iguana los que están revolviendo el agua, son los que están defendiendo intereses personales, realmente no están yendo a defender el pueblo, ellos buscan un beneficio económico porque ellos piden dinero (…) últimamente trajeron a un padrecito de Michoacán y vienen a imponer que estemos en contra del gobierno”.
Pidieron cárcel a quienes tomaron la bomba de agua de Zacualpan y a los que provocaron la violencia en la casa de usos múltiples de la comunidad “ellos andan cometiendo delitos, como tomar las bombas de agua, y la PGR es la que viene y nos ordena que dejemos el manantial Ojo de Agua”, aseveró.
Gregoria Lorenzo sostuvo que la han calificado de “matona” y advirtió que de no actuar podría haber más violencia en la comunidad.