Por: Martina Milagros Robles Sánchez
La comprensión lectora es la construcción de una representación fidedigna a partir de los significados sugeridos por el texto, enriquecida por las interpretaciones, inferencias e integraciones que el lector adiciona con la intención de lograr una representación fiel y profunda de lo que el autor quiso comunicar (Díaz, 2007)
Para que el lector construya representaciones del texto, implica que este tenga una serie de habilidades intelectuales básica para comprender y apropiarse de las ideas del autor. Algunos ejemplos de habilidades intelectuales que favorecen el desarrollo del manejo de la información y la comprensión de lectora son: reconocer, descubrir, relacionar, sintetizar, buscar, identificar, evaluar, seleccionar, organizar, entre otras.
Muchas de estas habilidades intelectuales se tienen que fomentar dentro de los primeros años escolares del niño y se van fortaleciendo a lo largo de la vida del individuo. En sus primeros contactos con escuela, se busca que el niño, adquiera la lectura y la escritura, que tenga acercamientos permanentes con los textos y muestre una actitud favorable hacia la lectura y la escritura a través de la expresión libre. Leer para entender es fundamental en los primeros años escolares, pues es el principio para desarrollar el pensamiento científico y la competencia de resolución de problemas.
Entre más experiencias de lectura tenga en niño, más será capaz de comprender lo que lea. Ya lo señala Cassany (1997) cuando hace alusión al modelo interactivo, que la comprensión del texto se alcanza a partir de interrelación entre lo que el lector lee y lo que ya sabe del tema. Es decir el lector enriquece y ajusta sus conceptos mentales con las diferencias que encuentra en lo nuevo que ha leído y así va construyendo información a largo plazo de forma estructurada y diferenciada para textos varios. De tal manera que cuando se enfrenta a un texto nuevo, está en condiciones de anticipar o formular hipótesis del mismo.
Algunas actividades que se deben realizar en el proceso de la lectura para asegurar que el lector comprende el texto, se ejemplifican en el siguiente cuadro (Solé, 1994):
| Antes de la lectura
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Durante la lectura
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Después de la lectura |
| ¿Para qué voy a leer? (Determinar los objetivos de la lectura)
1. Para aprender. 2. Para presentar una ponencia. 1. Para practicar la lectura en voz alta. 2. Para obtenerinformación precisa. 3. Para seguir instrucciones. 4. Para revisar un escrito. 5. Por placer. 6. Para demostrar que se ha comprendido. ¿Qué sé de este texto? (Activar el conocimiento previo) ¿De qué trata este texto? ¿Qué me dice su estructura? (Formular hipótesis y hacer predicciones sobre el texto)
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1. Formularhipótesis y hacer predicciones sobre el texto
2. Formular preguntas sobre lo leído 3. Aclarar posibles dudas acerca del texto 4. Resumir el texto 5. Releer partes confusas 6. Consultar el diccionario 7. Pensar en voz alta para asegurar la comprensión 8. Crear imágenes mentales para visualizar descripciones vagas
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1. Hacer resúmenes
2. Formular y responder preguntas 3. Recontar 4. Utilizar organizadores gráficos
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La práctica permanente de tales actividades en el proceso de la lectura, conducirá a los alumnos a una consolidación de la misma y a la apropiación y comprensión de los textos con los que interactúa. Además de que al aprender estrategias para el manejo de los textos, se formarán lectores autónomos, creativos y reflexivos capaces de manejar la información; así como de generar conocimiento.