El Partido Verde, ejemplo de pluralidad…
Por: Mayahuel Hurtado Ortiz
Por décadas esta frase ha sido utilizada para definir en nuestro país a la política “el arte de ponerse de acuerdo” y para muestra basta un botón, pues el pasado viernes en la tan anunciada toma de protesta del Diputado Federal Virgilio Mendoza Amezcua como Delegado del PVEM, se dieron cita personajes ampliamente conocidos del Partido Verde Ecologista, pero además, en el evento, se pudo apreciar un choque de bloques políticos que tras una tregua tácita, decidieron llevar la fiesta en paz.
Comenzó la lluvia de estrellas, quienes se saludaban y en algunos casos, de manera diplomática sostenían un dialogo, era el momento de demostrarle a la dirigencia nacional de ése instituto político, cuál era el peso de cada personaje para tener el liderazgo del PVEM en Manzanillo y a nivel estatal. En el Casino de la Feria estaban los seguidores de Virgilio Mendoza, los de Martha Meza, pero también en el lugar estaban los seguidores de Nabor Ochoa, todos dispuestos a ser visibles en el pase de lista.
El lleno total daba la muestra de una organización minuciosa y contabilizada del capital humano de los liderazgos del partido del Tucán, cada bloque debía cumplir a cabalidad la meta propuesta y nadie podía darse el lujo de que un solo lugar se quedara sin ocupación. Vimos la desbandada de los expanistas y de cientos de líderes que se sumaron a la causa de Virgilio Mendoza, pero vimos también en una proporción equiparable a la suma de esfuerzos de los Verdes de Nabor-Martha, quienes son los hijos con más tiempo de militancia y se podría decir que el lleno era una invitación a que la suma de voluntades lograra tejer los acuerdos que garantizaran a ése instituto político, su sobrevivencia rumbo al 2018.
En las fotografías se veían los rostros de quienes con gran talento político tuvieron que compartir la mesa, partir el pastel, sonreír para la foto y en lo sucesivo, trabajar en equipo. El evento terminó sin mayores incidentes, sin festejo al final, simplemente terminó y cada grupo se retiró del lugar. Por cierto al aún presidente de ése partido se le vio solo, sin grupo, sin cobijo, posando por “default”, por mero trámite.
Y es que los Verdes necesitan de inmediato definir quién será el que encabece los esfuerzos a nivel estatal tras la estrepitosa caída en el ánimo de la gente en el periodo de Trillo.
No queda de otra, el Partido Verde o se renueva en su presidencia estatal o podrá despedirse de curules y alcadías en el 2018. Al tiempo.
LOS REMOS DE LA PANGA:
REMAZO: En la toma de protesta de Virgilio Mendoza como Delegado del CEN del Partido Verde en el Estado de Colima, el gran invitado fue sin duda el gobernador José Ignacio Peralta Sánchez. Nadie como el gobernador ha demostrado en la práctica la lealtad a la amistad y la gratitud; nadie como él ha depositado la confianza de todo un sector costero como lo hizo desde las elecciones con Mendoza Amezcua. Hay quienes dicen que la declinación de Virgilio al buscar la gubernatura fue para que llegara Ignacio Peralta, yo difiero de esas voces, hay que entender los llamados y las circunstancias, los tiempos políticos y la personalidades. Aún no era el tiempo de Virgilio, pero ahora deja clara muestra de que cada día va abonándole más carga a la carreta, vaya que la va a necesitar para en 2018 medirse en una justa con Jorge Luis Preciado y en 2021, la guerra a muerte súbita.
REMO: Fue de llamar la atención la nutrida asistencia de priístas el pasado viernes a la toma de protesta de Virgilio Mendoza Amezcua. Al paso que van con tantas divisiones y migraciones, no va a haber quien cierre la puerta. El PRI necesita con urgencia reinventarse, los verdaderos priístas de hueso colorado, no quieren darse el lujo de ver su casa en ruinas.
REMITO: ayer entre erupciones del Volcán de Colima, temblor de 5.6 grados con localización a 56 kilómetros al suroeste de Cihuatlán y la amenaza de lluvias fuertes por el paso de la Tormenta Tropical “Seymour” concluimos la semana. Nos deja la enseñanza de cuán pequeños somos para la furia de la naturaleza.