El Francotirador
Aunque, en general, los problemas de indisciplina en Chivas bajaron notablemente (al menos ya no aparecen en los medios de comunicación), tres jugadores parecen no entender lo que el equipo se está jugando. Carlos Fierro y Jorge Enríquez ya se llevaron un fuerte jalón de orejas por andar de fiesteros al inicio del torneo, pero no les importó y en Guadalajara los ven cada semana en distintos bares, de los que salen a altas horas de la madrugada. A ellos se les unió Néstor Vidrio, quien andaba medio agüitado porque no pasó nada con el supuesto interés del Sporting de Lisboa en él. Eso sí, ya aprendieron la lección y cuando se les acercan para tomarse una foto con ellos, amablemente los invitan afuera de la ‘sede’ de la fiesta y posan en un lugar que no sea comprometedor. En la directiva están preocupados, porque Fierro y ‘Chatón’ simplemente no pesan y ambos eran las apuestas de la cantera rojiblanca. Basta con que investiguen un poquito lo que hacen fuera de la cancha para que entiendan la razón por la que ninguno de los dos se ha consolidado.
Cruz Azul aprieta el cinturón
La crisis económica que vive el país también llegó al futbol. Les cuento que mis amigos de la Cooperativa Cruz Azul decidieron limitar el gasto en el club, recortar lo que se tenga que recortar, y ajustarse a la realidad. Ya no están para derroches. Primero decidieron vender a Cruz Azul Hidalgo, en el Ascenso MX, porque ya no había dinero para subsidiar al equipo.
Después tomaron la medida de no más viajes por avión para los equipos Sub-17 y Sub-20. Los jóvenes canteranos tendrán que aventarse los trayectos por todo el país en autobús, a excepción de Tijuana, sitio al que sí llegarán vía aérea. Quienes se han salvado del recorte de gastos son los integrantes del primer equipo. Ahí todavía hay sueldazos, buenos restaurantes y hoteles de lujo. Eso sí, la ‘tijera’ anda fina por los caminos de La Noria y no sería raro que pronto ajustaran algo con los estelares.