Y es que, los vecinos manifestaron que escuchan gritos y lamentos pues al parecer encierran a los enfermos en cuartos con rejas al fondo de la casa, muy cerca del arroyo El Diablo.
Ahí también se quejan de que el encargado del albergue, Rigoberto Chávez Carrillo, quien vive por esa zona, está tomando terreno federal para ampliar las instalaciones, y con la construcción fueron cerrando más el cauce del arroyo, lo que arriesga taponamientos en temporada de lluvias.
Ante esta situación, Chapula de la Mora comentó que acudirá al lugar para supervisar la zona y conocer estas supuestas celdas de castigos, además de atender rumores sobre privaciones ilegales de la libertad y prostitución.
Exhortó a la Secretaría de Salud a visitar estos albergues de alcohólicos y drogadictos y verificar que los tengan en condiciones sanitarias óptimas, con los medicamentos necesarios y que no halla golpes ni malos tratos en sus tratamientos contra las adicciones.
Destacó que es importante escuchar las opiniones de los vecinos y de los internos, pues como en el caso de la colonia Francisco Villa donde se iba a abrir un albergue para alcohólicos y drogadictos, como los vecinos no estuvieron de acuerdo, el gobernador Mario Anguiano optó por negar el permiso.
Referente a la queja por construcción en la zona federal y el encauzamiento del arroyo fue enérgico al señalar que el Ayuntamiento de Villa de Alvarez debe hacer cumplir la ley, y Protección Civil vigilar esta situación para evitar accidentes sobre todo con la crecida del arroyo durante una tormenta.