Se dice que…
Por: Édgar Rodríguez H.
*Fiscalía “Molacha”, la Especial de la Procuraduría General de la República (PGR), Angelina Borbolla Moreno, hizo largo viaje a la ciudad de Colima para dar a conocer su gran descubrimiento de que los delitos contra los periodistas por el ejercicio de su función son difíciles de acreditarse. Y puso varios ejemplos del ello en transcurso de la conferencia magistral -todo es magistral- que recientemente impartió en la Universidad de Colima, “institución que es sagrada y orgullo de los colimenses” que tampoco toca mal las rancheras en el tema de la represión a la libertad de expresión de los propios miembros de su comunidad.
*El primero fue la agresión contra una comunicadora Karla Silva, corresponsal del Heraldo de Silao, Guanajuato, a quien a pesar de que le rajaron la cara y le golpearon la cabeza dentro del edificio mismo del periódico donde labora, a los responsables sólo se les pudo acreditar el delito de robo y lesiones sin el agravante de atentar contra su libertad de expresión. Otro caso citado por la conferencista fue el atentado perpetrado en contra el periódico Mural de Guadalajara donde integrantes del Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) arrojaron granadas contra el edificio pero tampoco se pudo acreditar la vejación contra su libertad de expresión porque el juez determinó que los delincuentes “sólo querían llamar la atención”.
*Se le agradece a Doña Angelina su recomendación en el sentido de deber “estar conscientes de que están siendo vigilados y que deben hacer un uso adecuado de sus redes sociales para no ser expuestos a una agresión”. La vigilancia en Colima sobre los comunicadores incómodos se ejerce desde bien identificados oficinas de gobierno a través de la intervención de celulares, teléfonos fijos y direcciones electrónicas de correos.
*Las denuncias por difamación son la respuesta en automático de funcionarios hipersensibles como el que decidió emprenderla en contra del periodista tecomense Belisario Romero, editor del periódico digital e impreso El Observatorio. Por aquello de no te entumezcas, al incisivo Beli ya lo amparó la justicia federal.
*En la carrera tricolor por la candidatura a gobernador de Colima, la senadora Mely Romero Celis desplazó ya del tercer lugar al Subsecretario de Comunicaciones de la SCT, José Ignacio Peralta Sánchez cuyos patrocinadores han cambiado su mira hacia la guapa cuauhtemense. El primer lugar lo sigue ocupando el alcalde capitalino Federico Rangel Lozano, quien a diferencia de otros acelerados, tiene su atención centrada en el fiel cumplimiento de las responsabilidades y funciones de tan importante cargo.
*En Manzanillo no quita el dedo del renglón el por tercera ocasión aspirante priista a candidato a presidente municipal Francisco Zepeda González, aliado ocasional de Nabor Ochoa López, quien no le haría el feo a un tercer turno a tan lucrativa posición. Por supuesto que los otropriistas dan por hecho que el próximo alcalde porteño será Pico, incluso han comenzado a inflar su puntuación, que en los hechos es sólo mito.
*Que el patrocinio emprendido por Nabor Ochoa López a favor de Francisco Zepeda, en lugar de ayudarlo lo hunde cada día más rezagando sus posibilidades de ser un prospecto priista a la alcaldía de Manzanillo.
*Como se están moviendo las aguas en el Puerto de Manzanillo, todo parece indicar que la única posibilidad del PRI para recuperar el municipio está en Fernando Morán, funcionario que si logra sacudirse las malas compañías, será un fuerte rival de la panista Gabriela Sevilla.
*El próximo sábado 27 de septiembre de 2014 se llevará a cabo el lanzamiento oficial del movimiento “Ciudadanos Construyendo el Cambio” que tiene como propósito concretar la alternancia ciudadana en los próximos comicios. La cita es a las 10 de la mañana en el Salón Alegra ubicado en la esquina del Tercer Anillo Periférico y la prolongación de la avenida Camino Real.
*Se salvaron los colimenses de que su gobierno los volviera a endeudar como lo hizo so pretexto del ciclón Jova, pues afortunadamente los recientes meteoros pasaron lejos del litoral colimense. Otra vez será. En tanto, sigue sin ajustarle el cuero pa’ las correos, o lo que es lo mismo, por más que le jala a la cobija no logra tapar los tremendos agujeros financieros hechos en los últimos diez años a las arcas públicas estatales.